Esta es la tercera ocasión en la que el artista se convierte en blanco de rumores de muerte desde su encarcelamiento. La reciente ola de comentarios surgió tras la aparición de una persona que, alegando haber compartido celda con él, afirmó que había sido asesinado por no cumplir supuestas exigencias de pandillas dentro de la prisión. Incluso se generaron teorías extremas relacionadas con tráfico de órganos. Las autoridades chinas negaron categóricamente estas versiones y recalcaron que difundir este tipo de contenidos puede conllevar consecuencias legales.
Kris Wu fue declarado culpable en 2022 por dos delitos, violación y por incitar a un grupo a cometer actos sexuales inapropiados y recibió una pena de 11 años y seis meses por el primer cargo y un año y 10 meses por el segundo.
Una vez que cumpla su condena, será deportado a Canadá, país del que posee ciudadanía y donde creció antes de alcanzar la fama como parte de un grupo de K-Pop en 2012.
Aunque su nombre vuelve a ser tema de conversación por motivos ajenos a la música, las autoridades remarcan que la situación del artista sigue su curso dentro del sistema judicial y penitenciario chino, y que cualquier otro rumor que intente distorsionar los hechos será tratado con firmeza.
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